El Metal, es la música para nosotros los que no encajamos,los rechazados, los raros, y las mil otras etiquetas que se nos han puesto. Pero puedo decir que ha sido en el metal en donde más he encontrado esa pertenencia, he hecho muchas amistades de muchas partes del mundo y en donde existe esta aceptación hacia los que somos diferentes. Lamentablemente, dentro de todo lo bueno que existe en el metal, hay un grupo turbio y lleno de odio. 

El día de hoy las bandas Sodom y Samael anunciaron que cancelarían su participación en el festival Steelfest en Finlandia, ya que el festival incluyó como parte del cartel a bandas que han sido conocidas por esparcir mensajes de odio ya sea dentro o fuera del escenario. 

Sin embargo, el problema de bandas que promueven propaganda de odio no es nuevo. Existe todo un subgénero del Black Metal catalogado NSBM, o Black Metal Nacional Socialista, las cuales como parte del mensaje en las letras de sus canciones son abiertamente nacistas. Algunas de las bandas que fueron anunciadas para participar en este festival están catalogadas en este subgenero como son Graveland, Satanic Warmaster y Nokturnal Mortum, aunque no todas las bandas en cuestion forman parte del NSBM, están Destroyer 666 y Horna que son conocidas por compartir mensajes de odio y promover la supremacía blanca.  Otra de las bandas en cuestion es Inquisition, la cual su vocalista ha sido ligado al nacismo/supremacia blanca, ademas de haberse declarado culpable en un caso de pornografía infantil en el 2009.

Se que habrá personas que digan, “hay que aprender a separar el arte del artista,” pero esto es imposible cuando ellos mismos utilizan su influencia y su plataforma para difundir mensajes de odio: racistas, sexistas, homofóbicos y xenófobos. Esos mismos mensajes que han sido esparcidos por gente el poder y que han influenciado a personas a perpetrar masacres, como la masacre en el club Pulse en Orlando, Florida, o la masacre en una tienda Walmart en El Paso, TX por nombrar algunas. 

La postura de los organizadores del festival han sido hasta ahorita de mantenerse neutrales mencionando que las agencias de algunas bandas les pidieron reconsiderar su alineación o que las bandas tendrían que cancelar. Mencionaron que habría cancelaciones pero aun no mencionan cuales ni los motivos.

Después de casi 2 años de inactividad de conciertos y festivales debido a la pandemia por COVID-19, se requiere de mucho valor para decidir separarse de un festival. Esto significa perder un ingreso económico para los artistas que han estado batallando desde principios del 2020. Toma mucho valor tomar la postura de Samael y Sodom al preferir no recibir un ingreso a ir en contra de sus ideales. En contraste, no tiene nada de valor presentarse con una pantalla de rudeza para aparentar ser “TRVE,” siendo alguien hostil que solo ofende, amenaza y acosa a otras personas y comunidades. Esparcir odio en esta comunidad llena de inclusion, camaraderia de la cual comencé hablando con orgullo, en donde si alguien resbala y cae durante el mosh pit, todos a su alrededor le ayudan a levantarse y seguir disfrutando, no debe ser tolerado.

Hay personas que abiertamente llaman a agreder, pero lloran en cuanto no son bienvenidas o su mensaje no es publicado. Lo que mucha gente llama “cultura de cancelación,” en realidad solo son consecuencias de las acciones que han tomado las personas públicas. Hay mucho trabajo por delante, pero el cambio empieza por acciones como el separarse de bandas con este historial y no relacionarse ni para compartir el escenario.